31 marzo 2015

MIKRO-RELATOS 2015. Relato ganador Categoría 2


Un día, caminando hacia la escuela se me pasó algo por la cabeza… ¿Y si la madrastra nunca hubiera tenido celos de Blancanieves? ¿Ni al lobo le gustaran los cerdos? ¿y si el padre de la Cenicienta nunca hubiera muerto? ¿Qué historia se contaría si no hubiera problemas?

Blancanieves quizás nunca hubiese conocido al príncipe; ni los cerdos contarían con tanta alegría; tampoco la cenicienta hubiera sentido la felicidad de librarse de la madrastra.
En ocasiones para tener un verdadero final feliz, debes haber sentido primero un comienzo triste. Nunca sabes lo que ganas si no has perdido. Sin una trama ni un problema, todo sería muy aburrido. ¿O acaso conocéis alguna historia, cuento o novela, en el que un hombre y una mujer se conozcan, estén juntos, se casen y vivan felices para siempre? No. Hay que darle vida a la trama para luego sentir más felicidad cuando acaben juntos.
Tampoco puedes sentir verdadera tristeza sin haber sentido felicidad. No hay alegría sin lagrimas, ni lagrimas sin alegría, son conceptos entrelazados, unidos por un mismo lazo.
Hay que valorar esos momentos de tristeza, pues será la único que luego te regalen tanta felicidad.
Llora y sonríe
A.R.
Primer premio
Categoría 2


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