28 octubre 2010

Elena Vizcay, Directora de Nuevo Futuro: 'Ven a Rastrillo'


Cada año por estas fechas el Rastrillo se cuela en nuestras vidas y se cuela en la vida de la ciudad. Son ya 16 años haciendo que ese microcosmos tome forma, se haga grande y pase a tener independencia y vuele por sí sólo.

Estamos en los preparativos. Cuánta actividad, cuántas prisas, cuántas gestiones, cuántos favores, peticiones y gestos cargados de compromiso, de solidaridad, de emoción y de responsabilidad. ¡¡¡ Qué gusto estar de nuevo en esos disfrutes!!!

La emoción es la que nos ha guiado siempre y la que siempre nos guiará. Descubrir que la emoción es el motor de nuestra asociación, es lo que levanta el ánimo en cada ocasión, por difícil que sea el camino. Así lo demuestran año tras año las voluntarias y voluntarios del Rastrillo. Ponen toda la emoción y la ilusión del primer día. Así involucran a sus amigos, familias, maridos, hijos, nietos, etc. etc. que os voy a contar que ya no sepáis.

Es la parte de emoción que somos capaces de transmitir, para ver, comprender y transcender a que todo el esfuerzo puesto en cada paso, se transforme en realidad. El Rastrillo es una bocanada de ilusión y motivación para llevar nuestro trabajo adelante y para hacer de cada proyecto un objetivo alcanzable y sostenible en favor de la infancia desfavorecida.

Entonces descubrimos que la emoción se funde con el equipo y que haciendo EQUIPO y con emoción, somos capaces de traspasar fronteras, luchar por conseguir un mundo más justo y equitativo y hacer que miles de niños, niñas y jóvenes tengan un futuro mejor y lleno de esperanza.

Pero… “si se hace en Pamplona, en un mercadillo, en un lugar con mucha gente y se compran cosas...” Sí, y se trabaja muchísimo, se rompen la cabeza por traer, año tras año, producto nuevo, más innovador, diferente, más barato, más chollo y más ganga. Y la ilusión y la emoción no bajan, hay que tener la cuerda bien tensada en motivar al equipo, a los equipos, porque más de 300 voluntarias y voluntarios, se organizan así en equipos y esa es la clave. Ese es el truco: el trabajo bien hecho de los distintos equipos que componen el Rastrillo y los más de 25 puestos o stands que cada año ven la luz.

Este año no va a ser menos. Repetimos escenario, pero lejos de ser igual vamos a contar con ubicarnos en las taquillas, aquéllas que nos recuerdan que en otra época esa estación de autobuses, ya antigua, fue lugar de encuentro, de despedidas y de bienvenidas. Me motiva saber que con esa ilusión y emoción vamos a llevar a cabo la XVI edición del Rastrillo. Ya hemos perdido la cuenta de cuantas empresas, organizaciones, restaurantes, instituciones, personas, grupos, actuaciones, artistas, escritores, etc. han formado parte y han hecho posible cada año el Rastrillo.

Quiero invitaros a formar parte de ese maravilloso proyecto de cooperación que llamamos Rastrillo, porque ello hace posible que los proyectos de República Dominicana, de Cuba, de Haití y de Perú en estos momentos, estén llenos de emoción y de resultados para hacer una vida más próspera y más justa a nuestra infancia. Gracias por hacer que nuevamente el Rastrillo sea un éxito. Haz que tu participación sea un "sueño para miles de niños".